Energía eólica: soluciones para cuando el viento falta

La energía eólica es, de acuerdo a un estudio que ya hemos comentado en este blog, la forma más eficiente y ecológica para producir energía eléctrica, sin embargo tiene un gran problema. El viento no siempre sopla y cuando no sopla no se puede producir electricidad. Entonces hay que recurrir a otros métodos de producción, incluidos la quema de combustibles fósiles, para poder alimentar la red eléctrica.

Un ejemplo de ello es España. Ciertas épocas del año tienen que comprar electricidad a Francia dado que no tienen viento suficiente para producir energía eléctrica, y cuando el viento sopla con fuerza han tenido que desconectar el 37 por ciento de sus aerogeneradores porque el exceso de electricidad producida ponía en riesgo su sistema de distribución de electricidad.   

He aquí un par de soluciones muy interesantes a este problema:

La primera consiste en aprovechar la energía eléctrica sobrante en momentos de mucho viento para bombear agua a puntos altos. Así, cuando no haya viento suficiente, se puede aprovechar esa agua dejándola caer y poniendo a funcionar así hidroeléctricas que abastecerían al sistema de distribución de electricidad.

agua

Otra idea consiste en aprovechar los momentos en que hay un exceso de producción de electricidad para utilizar los excedentes y bombear aire comprimido en suelos porosos, donde quedaría aprisionado de forma similar a como sucede en los yacimientos de gas natural. Así, cuando el viento no es suficiente, se activan generadores eléctricos alimentados por gas o por algún otro combustible convencional, pero cuya combustión se ve modificada y mejorada, ayudada por el aire comprimido procedente del suelo –de forma similar a como funcionan los turbocompresores de los motores de los coches. Esto no elimina la dependencia cuando no hay aire, pero según los investigadores puede suponer un ahorro de hasta el 50% del combustible requerido.

gas

Vía: Eco-microsiervos y Soitu