10 formas de salvar al mundo (I)
El editor de medio ambiente, Geoffrey Lean, del periódico inglés The Independent, ha publicado una lista de acciones a través de las cuales la humanidad podría salvar al mundo del cambio climático. Ésta es la primera de tres entregas en las que les presentaremos esta interesante lista:
1.- Deshacernos del hollín
Cortar las emisiones de hollín producidas por los combustibles sucios, como el diesel que consumimos en México, las fábricas y los incendios, es probablemente la más rápida de frenar el calentamiento global. Los científicos afirman que este es el segundo culpable del calentamiento global después del dióxido de carbono. El negro de carbón, del cuál ya les hemos hablado en este blog, y que le da al hollín su color, tiene dos efectos principales. Calienta la atmósfera al absorber la radiación del sol y luego liberándola, además de que oscurece la nieve y el hielo cuando se deposita en ellos, lo que produce que se derritan. Reducir las emisiones de hollín es algo realmente sencillo dado que existen las tecnologías pata hacerlo.
2.- Salvar la capa de ozono
Las medidas para salvar la capa de ozono han sido las más efectivas para combatir el cambio climático, dado que muchos de los químicos que atacan la capa de ozono son también gases de efecto invernadero. La efectividad del Protocolo de Montreal, que se firmo hace más de 20 años para proteger la capa de ozono, deja muy mal parado al Protocolo de Kioto sobre cambio climático. Mientras el primero eliminó el equivalente de 11 billones de toneladas de dióxido de carbono al año, el segundo tiene como meta cortar emisiones por 2 billones de toneladas. Los expertos buscan medidas para remover los químicos que actúan como refrigerantes de equipos como los refrigeradores. Cuando esto se logre, nos ahorraremos el equivalente a 20 billones de toneladas de dióxido de carbono.
3.- Hacer conexiones
La energía renovable es muchas veces poco fiable: el sol no siempre brilla, el viento no siempre sopla. Pero la Comisión Europea y otros organismo están estableciendo planes para darle vuelta a este problema y conectar estas formas de producción de energía. La energía solar, por ejemplo, podría establecerse en el Sahara, donde sólo una fracción del desierto podría proveer energía suficiente a Europa entera. La mareomotriz en las costas británicas, el mejor lugar para explotar este sistema de producción de energía. Grandes granjas de viento podrían construirse en el mar del norte, y estas podrían balancearse con las hidroeléctricas Noruegas, donde podría almacenarse el agua en sus presas, y cuando el viento que sople no sea suficiente, soltar sus aguas para producir electricidad.