¿Por qué se trató de vender la Isla San José en Baja California?
Hace más de un año se había publicado en Internet la venta de la isla San José, una de las áreas naturales protegidas más importantes de nuestro país, ubicada en el Golfo de California. El precio que se la había otorgado a esta extensión territorial alcanzaba los 90 millones de dólares (aproximadamente 1,500 millones de pesos), y la publicación señalaba que podía ser “negociable”.
Según lo establecido por la Cámara de Diputados, en 2013, se hicieron reformas al Artículo 6 de la Ley General de Bienes Nacionales, añadiendo un segundo párrafo al Artículo 162 de la Ley Agraria, para evitar que México venda sus islas. Meses después de este cambio, en abril del mismo año, se modificó el artículo 27 constitucional, permitiendo (irónicamente) que extranjeros pudieran adquirir inmuebles tanto en playas como en litorales mexicanos.
Esta es la razón que ha llevado a que San José padezca constantes polémicas por el deseo de particulares de adquirir parte de o todo su territorio.
De acuerdo con el Centro Mexicano de Derecho ambiental (CEMDA), aunque la mayoría de las islas del Golfo de California son propiedad de la Nación y en algunos casos se podrían encontrar otras modalidades de propiedad (ejidal, comunal o privada), lo cierto es que la isla, cuyo límite sur es una línea imaginaria que une a Cabo San Lucas en Baja California Sur con la frontera sur del Estado de Sinaloa, forma parte de todos los accidentes insulares del Golfo de California, sin importar su jurisdicción y régimen de propiedad, lo que implica que todo propietario o persona interesada en realizar actividades, en cualquiera de las islas, debe cumplir con las disposiciones vigentes sobre áreas naturales protegidas.
San José se ubica frente a Punta San Evaristo, a 80 kilómetros al noroeste de La Paz, desde Pichilingue, abarca unos 31 kilómetros de largo y 10 kilómetros de ancho. En ese entonces, se quería construir un desarrollo turístico-inmobiliario en el área, aunque no se especificaba dónde o cuál era el nombre del proyecto.
Recordemos que la isla integra el complejo insular que comprende el Área de Protección de Flora y Fauna Islas del Golfo, cuyo decreto tuvo lugar el 2 de agosto de 1978. Hoy en día posee un manglar y una laguna que es refugio para muchas especies de aves, entre ellas pelícanos, garzas y el gavilán pescador, esta última amenazada y en peligro de extinción.
De acuerdo con un estudio de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), la Universidad Autónoma de Baja California y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), titulado «Riqueza específica, distribución y abundancia de aves terrestres y marinas en Isla San José», en la isla existen 5,050 registros con 80 fotografías digitales de 49 especies.
Para conocer más sobre las estrategias que protegen a este maravilloso lugar, da clic en el enlace.
Fuente: BCS Noticias / CEMDA