México haz algo

Versión escrita de la cápsula radiofónica de Margarita Campuzano y Tania Mijares, en Radio Fórmula.

Hola Manuel y Patricia, buenas tardes, hace un año la Comisión Reguladora de Energía y el propio secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, explicaron que la norma 016 que regula la calidad de los petrolíferos en México había establecido un límite de 5.8% en las concentraciones de etanol, debido a que porcentajes superiores inciden en un incremento en los niveles de ozono y, por tanto, en un deterioro de la calidad del aire.

Durante todo 2016, las empresas agroindustriales de Estados Unidos que producen etanol se dedicaron a cabildear y a presionar al gobierno mexicano a fin de lograr que este porcentaje se elevara al 10% con el objetivo de poder importar sus combustibles a México y hacer un gran negocio en nuestro país.

Tristemente, el gobierno mexicano, particularmente la Secretaría de Energía y la CRE, han cedido a estas presiones y decidieron modificar la norma autorizando un 10% de concentración de etanol en las gasolinas. Esto se llevó a cabo a través de un procedimiento apresurado, que no tomó en cuenta las opiniones de diversas dependencias gubernamentales como el Instituto Nacional de Cambio Climático y la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México ni tampoco estudios y opiniones de organizaciones de la sociedad civil que han trabajado durante años el tema de calidad del aire.

Si bien esta modificación no incluye a la Zona Metropolitana del Valle de México, Monterrey y Guadalajara, es discriminatoria para el resto del país, pues este combustible sí estará disponible en otras regiones, incluyendo ciudades de la frontera o aquellas con mucha actividad industrial que ya tienen graves problemas de contaminación y altos niveles de ozono.

Las propias zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara y el Valle de México se verían afectadas por efectos bien documentados como la interconectividad de cuencas atmosféricas y el libre tránsito de vehículos entre zonas metropolitanas y el resto del país.

De acuerdo con datos de la Comisión Ambiental de la Megalópolis, 46% de la contaminación en las entidades que integran la CAME, es decir, la CDMX, el Estado de México, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y Morelos, es causada por el parque vehicular. De igual forma, 78% de los precursores de ozono en la ZMVM provienen de fuentes móviles, es decir de los automóviles. Quienes vivimos en la Ciudad de México sabemos lo que es enfrentar las consecuencias de vivir contingencias ambientales por los altos índices de contaminación.

El pasado 27 de junio diversas organizaciones enviaron una carta al director de la Comisión Reguladora de Energía manifestando su desacuerdo con la publicación de la modificación a la Norma 016 en el Diario Oficial de la Federación el día 26 de junio, sin haber terminado las discusiones en los grupos de trabajo conformados para tal efecto, sin haber presentado una Manifestación de Impacto Regulatorio y sin contar con todos los estudios técnicos o científicos que respalden el texto propuesto en dicho Acuerdo.

En México Haz Algo creemos que no hay esfuerzos pequeños y que todos podemos ser parte de la solución. ¿De qué sirve que el gobierno, a través de dependencias como la Semarnat, esté difundiendo comerciales en donde se ve a los niños encerrados y tristes en sus salones de clases debido a que no pueden salir a jugar por la mala calidad del aire, y por eso se han vuelto más estrictas las reglas para verificar nuestros automóviles, si el propio gobierno fomenta y facilita las reglas para que entren al país combustibles más contaminantes?

Los ciudadanos debemos poner nuestra parte responsabilizándonos de tener vehículos verificados y no contaminantes, pero el gobierno debe asumir su parte y comprometerse con el bienestar de la población y no con un grupo de empresas que sólo ven por sus intereses económicos.

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