La NASA lanzará un satélite para observar el dióxido de carbono en la tierra
La Nasa lanzará al espacio el Observatorio Orbitador de Carbono (OCO) el próximo 23 de febrero, a bordo del cohete Taurus XL, desde la base californiana de Vandenberg. El satélite rastreará el dióxido de carbono más cercano a la superficie terrestre, dónde más se notan sus efectos. Tendrá una vida útil de dos años y su misión es cartografiar los puntos de emisión y absorción del gas y conocer mejor cómo se desplaza el dióxido de carbono por la atmósfera.
Existe un gran desconocimiento sobre el comportamiento de este gas, la situación y el papel de los sumideros. Se estima que el propio planeta absorbe alrededor del 50% del dióxido de carbono que producimos y se cree que los océanos y los bosques de Canadá y Siberia, por su rápido crecimiento en verano, son los grandes puntos de absorción del dióxido de carbono, pero se requieren datos objetivos.
El OCO tiene un solo instrumento, un espectrómetro que rompe la luz del sol reflejada en la superficie de la Tierra en sus colores y, a continuación, el espectro de análisis para determinar cuánto dióxido de carbono y oxígeno molecular está presente.
Luego, cruzarán los datos con modelos de estimación para calcular cómo se mueve y se mezcla el CO2. Esta información es esencial para mejorar las predicciones de los futuros aumentos del gas y su impacto en el clima. Por tanto, puede ayudar a la toma de decisiones políticas sobre el cambio climático.
Fuente: Ecología microsiervos