DF albergará Cumbre del Grupo de Liderazgo Climático C40
El Gobierno del Distrito Federal anunció que la Ciudad de México se convertirá en sede de la Cumbre de Alcaldes del Grupo de Liderazgo del Clima C40, que tendrá lugar en el mes de noviembre de 2016.
En conferencia de prensa, el mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera, explicó que el DF fue seleccionado por el consejo de la cumbre de manera unánime, gracias al compromiso que ha mostrado la entidad con el medio ambiente y a su capacidad para llevar a cabo eventos de esta índole.
El encuentro reunirá a alcaldes de las ciudades de Nueva York, Chicago, Tokio, Hong Kong, París, Johannesburgo, Sao Paulo, Buenos Aires, y Berlín, entre otros, las cuales son líderes en materia de urbanismo y sostenibilidad.
De acuerdo con Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro y presidente del C40, ésta es la tercera cumbre consecutiva del Grupo, que en esta ocasión será recibida por una ciudad de América Latina, lo que demuestra la creciente importancia de la región en el escenario mundial.
El Grupo C40 se fundó en octubre de 2005, el cual comprendió a 18 ciudades del orbe reunidas en Londres, con el propósito de unir esfuerzos y establecer acciones que favorezcan el cambio climático a nivel mundial, promoviendo la lucha contra el calentamiento global y el cambio climático.
Desde el año 2006, el C40 trabaja en conjunción con el Programa de Ciudades de la Clinton Climate Initiative (CCI), que fue puesto en marcha por la William J. Clinton Foundation, alianza que fortaleció su vínculo a partir de 2011. La CCI aporta infraestructura y recursos esenciales que mejoran y aceleran las actividades que apoyan la acción climática del C40 en las ciudades.
Actualmente, la cumbre C40 reúne a representantes de 70 ciudades de todo el mundo, cuyas administraciones se han comprometido con el cuidado del medio ambiente, así como con la reducción de emisiones contaminantes.
Un estudio reciente realizado por expertos del Grupo C40, muestra que son ya 228 ciudades las que se han sumado al compromiso de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, lo que significa que estas urbes deberán reducir sus emisiones globales en 13 gigatoneladas de CO2 para el año 2050.