Estudiante busca reducir contaminación en ciudades mediante algas
Con tan sólo 15 años de edad, Margoth Marissa Gamboa Lugo, estudiante egresada del nivel secundaria e integrante del grupo de Apoyo a Sobresalientes del Estado de Sinaloa (Grupo ASES), ha propuesto junto con sus asesores desarrollar un proyecto científico, el cual busca instalar fuentes o espacios públicos con algas marinas para reducir los niveles de contaminación de una ciudad, ya que éstas son capaces de absorber el dióxido de carbono (CO2), considerado uno de los GEI que contribuyen al calentamiento global.
El proyecto denominado Algas salvadoras del planeta ha obtenido reconocimiento en diversas ferias de ciencias, tanto en el estado como en la región. Hace poco, Marissa participó en el Foro Jóvenes Emprendedores, donde obtuvo la acreditación para la Feria de Ciencias e Ingeniería en el estado de Amapá, en Brasil, que tendrá lugar del 21 al 23 de septiembre.
«El proyecto que estoy desarrollando consiste en que las algas marinas estén en un criadero, tipo fuente, que ellas absorban el dióxido de carbono, que es el principal gas de efecto invernadero que causa el cambio climático, y así lo transformen en oxígeno para beneficio de todos», comentó la estudiante.
Gamboa Lugo mencionó que en el Grupo ASES fue donde le dio forma a su planteamiento, optando por la cuestión del cambio climático debido al calor tan fuerte que existe en Culiacán. Dijo haber visto un documental sobre el tema, donde se hablaba de que las algas tenían una gran capacidad para reducir el CO2, por lo que decidió investigar más y planteó el proyecto para que pudiera aplicarse en las ciudades, a fin de usar las algas en forma de árbol, o como fuentes, para reducir el dióxido de carbono que liberan los automóviles.
Gracias a ello, Marissa ganó el Concurso Estatal de Geografía y obtuvo el tercer lugar en la Feria Estatal de Ingeniería, lo que le dio su pase a la competencia nacional, donde podría comprobar y aplicar su proyecto para hacerlo realidad.
En cuanto a echar a andar su propuesta, destacó que primero empezaría por los parques de las ciudades con altos niveles de contaminación.
La joven ha asumido su proyecto como una misión de vida, pues es algo que desea realizar para crecer y aprender.
«Estoy probando un sistema en el que las algas reducen los niveles de dióxido de carbono. Pruebo vertiendo cantidades de dióxido de carbono, que es lo que exhala una persona al día, en cantidades de bicarbonato, es un kilogramo solo una persona. Veo cómo las algas pueden procesarlo y desarrollarlo», explicó.
La sinaloense aclaró que su proyecto demuestra no solo cómo las algas pueden absorber el dióxido de carbono, sino que al hacerlo crecen y pueden convertirse en biocombustible. Los combustibles fósiles están liberando mucho dióxido de carbono, así que, además de prevenir las emisiones de CO2 por el uso de combustibles, se estarían reduciendo; es un ciclo de reducir y prevenir.
Hasta el momento, Margoth Marissa ha obtenido cuatro premios gracias a su innovadora propuesta: el primero, en el Congreso Estatal de Geografía; en San Luis Potosí ganó una acreditación para la Expociencias Metropolitana; después, un tercer lugar en la Feria Estatal de Ciencias e Ingeniería; y finalmente, en el Foro Jóvenes Emprendedores, donde obtuvo la acreditación para Brasil.
Ahora, la estudiante se está centrando al 100% en cómo aplicar su grandioso trabajo.
Fuente: Agencia Informativa CONACYT