México haz algo

Versión escrita de la cápsula radiofónica de Margarita Campuzano y Tania Mijares, en Telefórmula.

El 1 de julio tuvieron lugar en México las elecciones federales, en las cuales resultó electo para presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Para la sociedad civil resulta fundamental empezar a trabajar con la nueva administración en exponer, visibilizar y proponer soluciones para los grandes problemas ambientales que nos aquejan.

El saldo que queda para la nueva administración en materia ambiental, entre muchos retos pendientes, es el siguiente:

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), el costo ambiental que el país tiene que asumir por daños ambientales equivale al 5% del Producto Interno Bruto, a precios de mercado. Esto incluye los gastos por agotamiento de hidrocarburos y recursos forestales, así como los costos por degradación del suelo, residuos sólidos y contaminación del agua y el aire.

En materia de combate al cambio climático y transición energética, si bien durante este sexenio se dio un importante impulso a las energías renovables, particularmente a la eólica y a la solar, éstas aún representan poco menos del 10% de las fuentes de generación de energía y sigue preocupando la apuesta que hizo el presente gobierno al gas natural y al fracking.

En materia de Áreas Naturales Protegidas, se decretaron nuevas áreas que abarcan una superficie de 65 millones de hectáreas terrestres y marítimas. Sin embargo, está pendiente publicar los programas de manejo de alrededor de entre el 30 y 40% de éstas. Asimismo, se debe asignar presupuesto suficiente para vigilar que no se desarrollen dentro de ellas actividades irregulares. Recordemos que, sumados los presupuestos asignados durante 2016 y 2017, se ha recortado a Semarnat alrededor de un 50% de su presupuesto.

En materia de conservación, sólo por mencionar dos casos urgentes, se requiere concretar el refugio pesquero para la tortuga caguama en el golfo de California y continuar luchando por evitar la extinción de la vaquita marina.

De igual forma, se deben reforzar los esfuerzos para conservar y proteger los manglares, arrecifes de coral y los bosques, recordando que hay un compromiso de alcanzar una tasa cero de deforestación hacia el año 2020.

Preocupa que la actual administración haya dado prioridad a la siembra de organismos genéticamente modificados (OGM), lo cual está ocasionando la deforestación la selva maya y afectando otras actividades productivas como la apicultura y la siembra de maíz. Como un pendiente de esta administración quedó también no haber modificado el instrumento del Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental, para hacerlo una herramienta que efectivamente permita mitigar y prevenir de forma más eficaz los impactos ambientales de los proyectos.

Finalmente, uno de los rezagos más graves se encuentra en las violaciones de los derechos humanos de las comunidades más vulnerables y las agresiones a defensores ambientales. Durante 2017 se identificaron 88 casos de ataques, en los cuales murieron 29 personas.

En México Haz Algo creemos que no hay esfuerzos pequeños y que todos podemos ser parte de la solución. Es responsabilidad de todos exigir al nuevo gobierno que retome estos temas pendientes y se comprometa en solucionarlos. De nuestra parte está también ayudar a proteger y conservar nuestro medio ambiente y no creer que todas las soluciones deben venir del gobierno.

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Gracias y buenas tardes.